MONARQUÍA PERUCHA

Lo publicado la semana pasada por RPP sobre aquellos postulantes a las elecciones municipales y regionales cuyo único “mérito” o antecedente que muestran es el tener vínculos familiares con el dueño, perdón…, líder de un movimiento político, solo confirma que este es un mal, lamentablemente, en todos los rincones del país.

Por lo tanto, lo que viene ocurriendo en Loreto, lo que se va mostrando en Iquitos no debe sorprendernos. Es decir, que en tal o cual movimiento vaya en la lista de regidores el cuñado, el hijo, el amiguito, el chupe o el testaferro, ya debe ser tan normal para la gente como que los conductores se estacionen sobre el crucero peatonal de las esquinas. O que lleguemos siempre tarde a un compromiso. O que nos dejemos convencer facilito con regalías sin importarnos las propuestas. No pasa nada, pues.

Por eso me extraña que se estén jalando los pelos porque en los ex arbolitos -hoy espigas- vayan como aspirantes a regidores varios que les gustó la vaina y quieren repetir el plato. Van en la lista de Monasí a Maynas los que provienen de distintas canteras, pero ahora se han unido en torno a la miel olvidándose que hasta hace un par de meses no se podían ver en torno al panal en las sesiones de Concejo. ¿Cómo se explica eso?

Pero hay otros que miran más alto y apuntan para consejeros regionales y hasta para vicegobernadores. ¿Qué en común tienen Andrés Ferreira con Ofelia Chávez? Si eran agua y aceite como regidores en Maynas, pero ahora lucen el mismo polo, el mismo símbolo. Bien ñañitos ellos.

Y si saltamos a la vereda del frente, al galpón de los gallos, pues las cosas van por ahí nomás. De arranque llama la atención que vaya como número dos en la lista de consejeros regionales, Roberto Sanjurjo Wong, ¿Quién es este pata?, pues hijo del actual alcalde de San Juan y que es candidato a la Municipalidad de Maynas precisamente por MERA, ¿se entiende la jugada y la movida, verdad?

Y así, podemos ir mostrando y mostrando, sacando y sacando, destapando y destapando la olla, y sentiremos que algo feo se está cocinando. Al menos, desde ya, el menú no es del agrado de todo aquel ciudadano que está cansado de esta forma torpe de hacer política. De más de lo mismo.

Quiero dejar, sin embargo, en claro que en lo personal no solo me molesta que estos líderes tengan complejos de reyezuelos, que más que gobernar en democracia quieren ser una burda y huachafa monarquía perucha. Ni que tengan formación técnica, profesional o son magister en tal o cual especialidad. Yo me mantengo en que para ser honestos, justos y transparentes, para ser buenas personas y solidarias, no se necesita tener doctorados ni “PhD”.

Tan solo, no olvidemos que por el mismísimo Congreso de la República pasa cada hijo de vecino de cuello y corbata, con ponchos y ojotas, o con cushmas y plumas. Y eso jamás marcó capacidad en ese recinto.

¿Recuerdan ustedes quienes fueron los consejeros regionales de Robinson e Yvan? ¿Y reconocen a los actuales? A todo ese ejército de regidores que pasaron por Maynas, Punchana, Belén y San Juan, ¿Ah? Yo digo que habrá algunas honrosas excepciones, pero eso no debería ser lo normal. Pues el sentido común nos indica que en esos cargos deberían estar los mejores y reconocidos ciudadanos.

Y eso lo puedo graficar en la persona de la señora Ofelia Chávez, a los que muchos la quieren desacreditar por haber sido cantante de orquesta. Sin embargo, la actual regidora tiene un título profesional en Educación, además de maestría. Por ese lado entonces, qué le podemos increpar, al contrario, con su trabajo de artista -como muchos de sus colegas- se ha costeado sus estudios profesionales. Mi cuestionamiento va a los merecimientos para ir en uno de los primeros lugares de la lista de consejeros regionales por la espiga, cuando ni ella misma es capaz de demostrarnos los méritos en su desempeño como regidora de Maynas.

Entonces, si queremos cambiar las cosas para tener gobiernos más eficientes, no solo debemos prender la mirada de atención a los candidatos a gobernador o alcaldes sino en quienes serán los posibles consejeros y regidores. Ojo con eso, después lamentos en la playa cuando una vez más elijamos convidados de piedra y meros secretarios o peleles de la autoridad de turno.

@RMezaS

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